Gorro de piloto y jetpack DIY

8/18/2016

Vuelvo a la carga con un proyecto chulo de verdad. No muy complicado pero tremendamente resultón: Un gorro de piloto y una mochila voladora o jectpack.



Aunque me encanta hacer cosas para mi hijo (que es el modelo), esto lo hice para el cumpleaños de otro niño. Me gusta regalar cosas hechas por mí o hechas entre mi hijo y yo, siempre sabiendo que la madre/padre de la criatura está de acuerdo y va de este palo. Hay que entender que no a todo el mundo le gusta lo hecho en casa.

Este proyecto consta de dos partes. Por una parte está el gorro, que está hecho de fieltro y cosido a mano, rematado con festones y hecho de forma crecedera. Los niños tienen la cabeza pequeña y mejor que les valga durante un tiempo. Yo usé tela marrón, amarilla y blanca (para el "borreguito" delantero). Le añadí unas gafas de bucear del chino (que me costaron 1€) y les cambié la goma por una negra y ancha que pasé por las trabillas. Al verlo sin poner se arruga un poco, pero la goma tiene que ajustarse para que no se caigan las gafas.


Por otro lado, está la mochila jetpack. Seguro que habéis visto en Pinterest un montón de modelos y variaciones. Yo cogí lo que más me gustó de todas ellas y las junté en un modelo personalizado. Como es el primer proyecto que he hecho, tiene sus fallitos, pero también sus aciertos.




Para empezar, las botellas que usé fueron de 1,5 litros, pero quedaron un poco pequeñas. Mejor usar de 2 litros de Coca-Cola o similar. Si puede ser que tengan la superficie lisa y así no hay que alisarlas (podéis ver cómo hacerlo en este vídeo; por cierto, vaya invento).

Las letras están hechas con una pistola de cola caliente. Primero se dibujan con lápiz y se van rellenando. Las tachuelas que se ven arriba y abajo también son puntos de cola, pero no lo recomiendo. Se tarda mucho en hacer cada una. Mejor pegar cualquier abalorio con forma redonda u ovalada.

Antes de pintar, hay que lijar las botellas con una lija de gran fino. Si es posible, hay que dar una capa de imprimación con pintura blanca preferiblemente, aunque he visto a gente hacerlo con pintura negra que da un acabado diferente al metalizado. Si no tenéis tiempo para la imprimación, lijad y spray. Para pintar las botellas sin mancharse, lo mejor es meter un palillo chino por la boca y asegurarlo con cinta de carrocero. Así se puede sujetar sin manchar nada que ya esté pintado. Yo utilicé pintura dorada en spray y le di dos capas siguiendo las indicaciones del bote. 


Una vez secas, les puse las llamas de fieltro con cola y cubrí el final de la botella con cinta de embalar negra. Las asas para colgarla a la espalda las hice con trapillo negro trenzado. En la parte delantera coloqué un mosquetón dorado oscuro de un bolso viejo junto con su anilla. Consejo: nunca tiréis los bolsos sin quitarles los herrajes, anillas y adornos de las cremalleras que se puedan reutilizar.

A la hora de montarlo tuve algún problema. Como las botellas no eran planas del todo, no se pegaban del todo bien a la plancha trasera (hecha con cartón y cinta americana). Así que acabaron por despegarse horas antes de irnos al cumpleaños. Lo solucioné uniendo las botellas a la plancha con bridas, lo cual fue un tanto complicado pero efectivo. Los detalles que se ven en rojo y dorado están hechos con la pistola de carga y cartuchos de purpurina roja y dorada.

El resultado final fue muy aparente y resistente. Las botellas tienen un tamaño normal para un niño de 5 años, el casco no quedó apretado y el mosquetón metálico fue un puntazo que acabó de convencer.

Tiempo total: 5 horas
Materiales: botellas de plástico, trozo de cartón, cinta americana, cola caliente, spray dorado, pintura de imprimación, papel de lija, fieltro de colores, trapillo, mosquetón metálico reciclado o cierre similar.
Dificultad: Media

You Might Also Like

0 comentarios

Síguenos en Facebook

Subscribe